Doce muertes violentas dejó la Semana Santa en La Guajira
Por: WILFRIDO VARGAS N.
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En accidentes de tránsito perdieron la vida cinco personas
Cinco personas perdieron la vida a bala, cinco más en accidentes de tránsito, uno por inmersión y otro en un accidente de trabajo; este fue el resultado en muertes violentas, durante los días de la Semana Santa.
En una clínica de Riohacha, murió un comerciante, quien fue baleado en una trocha en Manaure, cuando conducía su motocicleta. Un hombre con problemas mentales, murió al recibir la descarga de una escopeta calibre 12, en la vereda Caracolí, comprensión de Hatonuevo, después de herir a dos trabajadores de una finca y varias reses.
Hasta Maicao fue conducido un soldado profesional, herido con bala de fusil, donde murió, después de quedar por fuera del perímetro del destacamento militar en La majayura y no entregó la señal de reconocimiento.
En Manaure fue ultimado a bala un albañil, delante de sus hijos. Muerto a golpes en la vía Barrancas-Guayacanal fue encontrado el propietario de un expendio de carnes en Hatonuevo.
Y en el corregimiento Palomino en Dibulla, un pescador fue atacado a bala, cuando estaba jugando dominó, junto a varios vecinos y amigos, resultando otro de los jugadores lesionado.
Para el analista de criminalística Wilfrido Vargas Niño, la Semana Mayor del 2013 en La Guajira, contó con menos muertes violentas al relacionarlas a las ocurridas en el año inmediatamente anterior.
A diferencia del 2012, siguió afirmando Vargas Niño, se registraron siete homicidios, uno de ellos fue con cuchillo y los demás con armas de fuego, ocho muertes en accidentes de tránsito y tres personas más murieron de manera accidental.
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En accidentes de tránsito perdieron la vida cinco personas
Cinco personas perdieron la vida a bala, cinco más en accidentes de tránsito, uno por inmersión y otro en un accidente de trabajo; este fue el resultado en muertes violentas, durante los días de la Semana Santa.
En una clínica de Riohacha, murió un comerciante, quien fue baleado en una trocha en Manaure, cuando conducía su motocicleta. Un hombre con problemas mentales, murió al recibir la descarga de una escopeta calibre 12, en la vereda Caracolí, comprensión de Hatonuevo, después de herir a dos trabajadores de una finca y varias reses.
Hasta Maicao fue conducido un soldado profesional, herido con bala de fusil, donde murió, después de quedar por fuera del perímetro del destacamento militar en La majayura y no entregó la señal de reconocimiento.
En Manaure fue ultimado a bala un albañil, delante de sus hijos. Muerto a golpes en la vía Barrancas-Guayacanal fue encontrado el propietario de un expendio de carnes en Hatonuevo.
Y en el corregimiento Palomino en Dibulla, un pescador fue atacado a bala, cuando estaba jugando dominó, junto a varios vecinos y amigos, resultando otro de los jugadores lesionado.
Para el analista de criminalística Wilfrido Vargas Niño, la Semana Mayor del 2013 en La Guajira, contó con menos muertes violentas al relacionarlas a las ocurridas en el año inmediatamente anterior.
A diferencia del 2012, siguió afirmando Vargas Niño, se registraron siete homicidios, uno de ellos fue con cuchillo y los demás con armas de fuego, ocho muertes en accidentes de tránsito y tres personas más murieron de manera accidental.
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