¡ El reinado de la muerte !

Por Luis Mora Domínguez.

Erase una vez un reino donde todos los días mataba a personas... los muertos eran llorados por sus familiares y amigos, mientras la gente del pueblo no dejaba de sorprenderse:  ¡MATARON A JULIÁN EL DE LA TIENDA!, pobre hombre tan trabajador.

¡Supiste que mataron a Carlos el pescador! hay vee.... pobresito y deja tres hijos pequeños!

Mataban a los trabajadores de empresas, a los informales, a los estudiantes,a los periodistas, a los médicos, a los dueños de tiendas o almacenes, a los comerciantes, a los líderes sociales, etc. etc.

Así transcurrían los días en el reino, todos los días mataban y mataban y mataban y los miembros de la corte ni se inmutaban, solo decian algo cuando el muerto era un allegado suyo o un miembro muy sobresaliente del reino.

Los matadores andaban como Pedro por su casa, divirtiéndose tomando licor y consumiendo todo tipo de sustancias, que al parecer los hacía inmunes al dolor que causaban.

Las lamentaciones, la sorpresa y el dolor del pueblo quedaban allí en los comentarios del por qué lo mataron si era tan buena persona.

Los muertos era trabajadores a quienes sus victimarios le quitaban sus pertenencias, otros simplemente reclamaban ante el reinado un mejor vivir.

Nadie se escapaba del accionar de los matadores.

Los matadores: unos actuaban por su cuenta y otros prestaban sus servicios al reinado.

Se llegó a decir que dentro del reino había unos poderosos que tenían ejércitos de matadores.

El tiempo siguió pasando, los matadores siguieron matando y la gente que moría se quedaba... MUERTA.

En algunos casos uno que otro matador era encarcelado, pero muchos salían al poco tiempo libres para seguir matando, porque los miembros encargados de impartir justicia en el reinado no tenían las pruebas suficientes para condenarlos.

También se comentaba entre las personas que vivian en el reino, que había casos en que con dinero se lograba sacar de la cárcel a un matador.

En algunos rincones del reinado no mataban a uno, sino a grupos, había masacres.

Casos de asesinatos de niños y niñas que eran violadas, eran el pan nuestro de cada día, pero para el reino, todo iba muy bien porque la gente pagaba sus impuestos para que los miembros de la corte vivieran con todas las comodidades y el confort que ellos se 'merecían'.

Los súbditos del 'reinado de la muerte', al parecer se acostumbró a sus gobernantes, porque hasta el momento todo sigue igual y cuando algunos manifiestan que se debe cambiar al Rey y a sus miembros, otros se le enfrentan tratandolos de traidores, de comunistas y de ignorantes.