Columnista de El Tiempo y director Fm radio enciende advertencia a oposición

 

Por Martín Nicolás Barros Choles

El político, columnista y director  de noticia en FM radio, Juan Lozano Ramírez, en  su columna publicada por el diario El Tiempo de  fecha 24 de marzo, titulada “ Instrucciones  para   perder ( otro vez) las elecciones” Sección 1° pagina 11 en la que expresa de forma puntual, motivos previstos y razones, que pone de presente, para información y conocimiento, de la oposición al gobierno del  presidente Gustavo Petro Urrego, en procura de reconquistar el  gobierno para el próximo periodo, que comienza en el mes de agosto (7) del año 2026.

La opinión textual, en apartes editadas de manera  reiterativa y abreviada, del citado columnista es el siguiente:

“Primera: subestimar a Petro” “Vuelvan hacer y sigan repitiendo frases como “Petro tiene techo” o “Petro va muy mal en las encuestas”. Para que tengan claro: Petro tiene el poder del Gobierno, conserva una base popular muy sólida y, contra viento  y marea, ya tienen trabajando  para el en el petrismo y para el candidato o candidata petrista a los operadores políticos más eficaces del país para conseguir votos a como de lugar, que se llaman Armando Benedetti Roy Barrera y Mauricio Lizcano”.

El columnista hace referencia a las divisiones partidistas y la cantidad de aspirantes a la presidencia, por parte de miembros de la oposición, remembrando lo ocurrido en las elecciones del año 2022.

“Segunda dividir la oposición y lanzar candidato por docenas” “Repitiendo la película, la oposición a Petro se divide, se subdivide y se vuelve a dividir, Con la feria de las vanidades de los candidatos que le hacen oposición (…) Divididos están perdidos”.

Recrimina las oposiciones a iniciativas populares, sin ningunas opciones de alternativa, que justifiquen o superen impases.

“Tercera: oponerse a las iniciativas populares de Petro, sin presentar y sin conexiones emocional con el pueblo”.

“Cuarta: contestar con ofensas las ofensas presidenciales (….) “Mientras Petro sabe claramente para donde va, sus opositores pierden la brújula con cada batatazo y ¡vaya paradoja! -terminen en ello mismo multiplicando el efecto de las ofensas”.

Les advierte sobre la competencia de ganar electores en sectores populares, por no ser suficiente para triunfar con los mismos votos cautivos de los estratos cuatro en adelante.

“Quinta:  disputar a dentellada el voto antipretista y olvidar los sectores por recuperar (…) “No están luchadose esos afectos, no están dando la batalla por ganar el corazón, la razón y el voto de esos sectores que el petrismo ha interpretado bastante bien”.

Sexta: creer que solo con dar alaridos contra Petro se gana una elección (…) Si no constituyen un programan si no enarbolan unas ideas, si no encarnas unas causas con arraigo entre los colombianos, el petrismo vuelve a ganar (…).

Remata con otras: recomendación, insinuación o advertencias 

“Séptima: Olvidar las listas de Congreso” 

(..) “Todos quieren ser presidentes y nadie está dispuesto a ir al Congreso Grave error (…) “Mejor ser una estrella en el Congreso que un excandidato presidencial derrotado y corresponsable de un nuevo triunfo del petrismo”.

Concluyendo: “… la oposición a Petro va siguiendo las instrucciones para volver a perder las elecciones”. Por último, les pregunta: ¿Van a seguir por el mismo camino?

¿Quién es el columnista Juan lozano Ramírez? 

Es un abogado, político y periodista, inició la aventura política, a lado del inmolado Luis Carlos Galán Sarmiento, haciendo parte de la creación del Nevo Liberalismo, designándolo secretario privado de Galán, en la nueva organización política. Posteriormente saltó al uribismo, en cuyo gobierno de Álvaro Uribe, lo nombraron Ministro del Medio Ambiente. Fue senador del Partido de la U ocupando el primer lugar en votación, obtuvo la mayor votación, antes de crear el Centro Democrático, Últimamente está dedicado al periodismo, hablado y escrito, dirigiendo emisoras de la organización Ardila Lule y en condición de columnista, en el diario El Tiempo, también fue columnista del Espectador. En sus opiniones y comentarios radiales y escrito, se expresa de manera critica, objetiva y franca; en “blanco y negro” que muchas veces, generan disgusto, porque la verdad, no siempre es de mucho gusto, sobre todo, cuando desvirtúa, engaños, manipulaciones, emociones distorsionada y mentiras, aterrizando en crudas realidades que deben aceptarse para corregir errores y equívocos, con sinceridad. 

En Colombia, están acreditados 32 partidos políticos con personería jurídica, pero ninguno en particular, tienen o disponen de militancias, para postular candidato, sin alianzas, ni coaliciones, por estar diezmado en apoyo popular y recurren a las negociaciones de compraventas de votos. El 80% de los votos que suman en listas, son comprados, con diner0s, burocracias, contratos y ordenes de servicios. Carecen de pensamientos políticos, porque únicamente se dedican a las prácticas de corrupción, en avaricias de negocios, para enriquecerse y apropiándose de derechos, en el ejercicio de su periodo para el cual son elegidos.

 

Que se logre una elección presidencial en una sola vuelta, como ocurrió dos veces consecutivas, con el expresidente Álvaro Uribe Vélez, del Centro Democrático, difícilmente ocurriría, en un estado polarizados por intereses y sin lineamientos ideológicos, transformados en mercadeos electoral, con votos preferentes, con los que se hacen elegir, sin proyectos, ni programas en acciones operativas. Sin perspectivas, distintas a manipulaciones y engaños, utilizados para pescar y cazar, incautos e ingenuos, aprovechadas por individuos mercadees, que no visionan y deambulan erráticos. Se necesita pasar y ganar, en tres vueltas, para llegar a la presidencia, que inician por seleccionar una candidatura, mediante consulta popular, entre un lote de precandidatos, de diversos partidos, que seria para el segundo domingo de marzo, luego candidato, en la primera vuelta. Para ganar se necesita sobrepasar, el 50% de la votación total, De no lograrla, habrá una segunda vuelta, entre los candidatos, que obtengan las dos mayores votaciones.