EL LEGADO DE RAFAEL BAQUERO HERRERA

COLUMNISTA

HERNÁN BAQUERO BRACHO

La noticia del fallecimiento del abogado guajiro Rafael Francisco Baquero Herrera, este 23 de septiembre en la ciudad de Bogotá, trajo en mí, sentimientos de pesar, pero también sentimientos de inmenso orgullo, de ser sobrino y paisano de uno de los hombres más valiosos que ha dado esta tierra guajira.

Rafael Francisco Baquero Herrera, fue un prestigioso abogado villanuevero, casado con Carmen María Álvarez de Guaduas Cundinamarca, con quien tuvo a: Margarita, Sonia, Rafael, Andrés, Ximena, Javier, Felipe y Julia Isabel Baquero Álvarez, así como Dennis Sánchez Baquero, brillantes profesionales como su padre y acogió como un hijo a su nieto que crío, Luis Guillermo Baquero Rojas, quien es el director de Guajira 360 en el departamento. Rafael fue un gran patriarca conservador, y que debido a su vasto conocimiento en la ciencia del derecho, fue profesor prestigioso de universidades como la Nacional de Colombia y Sergio Arboleda, además de tener en pleno centro de Bogotá, su oficina privada de abogado, quien lo acompañaba como abogado auxiliar German Buitrago. Producto de ese amor por el Partido Conservador, formó gran amistad con el expresidente Misael Pastrana Borrero, quien lo impulsó para que en el año de 1974 hiciese fórmula con el médico riohachero Nelson Amaya Arregocés, y ocupasen así un escaño en el Senado de La República. En su paso por el Senado puso su capacidad de servicio en bien de los guajiros.

Tenía su casa en ese entonces en la calle 29 con carrera 5, casa a la cual concurrían sus amigos de esa época como el doctor Edgardo Maya Villazón, pariente nuestro, su mamá era prima hermana del Dr. Baquero y también acudía José Alfredo Escobar, el hijo de Hugo Escobar Sierra con quien mantenía una amistad extraordinaria. Esto lo recuerdo como si fuese ayer, donde realizaban buenas tertulias sobre la realidad del país.

Esa carrera ascendente del doctor Rafael Francisco Baquero Herrera, parecía no tener barrera, por su brillante carrera en el derecho, fue elegido Magistrado de la Corte Suprema de Justicia en la Sala Laboral, donde se desempeñó con lujo de competencia, con sindéresis, con rectitud moral y probidad en todos sus actuares. Allí demostró sus conocimientos en el área laboral con solvencia moral. Aun al día de hoy, jamás se oyó decir que el Dr. Baquero Herrera estuviera inmerso en cualquier componenda. Como auxiliares del magistrado recuerdo dos buenos amigos y juristas: Edgardo Maya Villazón y Gilberto Orozco Orozco, quienes descollaron de manera brillante a la confianza depositada por el Magistrado. Pasados los años de estadía en Bogotá, se residenció en el barrio Santa Bárbara por la calle 116 con carrera 14B, vivienda a donde igualmente llegaban sus amigos cotidianos y amigos magistrados de la misma Corte a consultarle sobre disposiciones legales. Después de haber desempeñado con éxitos su alta dignidad de Magistrado de la honorable Corte, esta mismo Corte lo elige como Conjuez. Que grandeza de este gran ser humano.

Para el año de 1983 el 11 de enero, la Corporación de Amigos de La Guajira, le otorgó el Yotojoro de Oro en la modalidad de honor al mérito profesional en al ciudad de Riohacha, en las instalaciones del banco de La República, con la asistencia del ministro de minas y energía de la época y presidente de Carbocol e Intercor, así como el gobernador del departamento. En el año 1989 el gobernador de la época en La Guajira, Luis Felipe Ovalle Isaza, lo condecoro en el palacio de La Marina, con la orden Almirante Padilla. En el año 2017, cuando Luis Alberto Baquero Daza ejercía como alcalde municipal de Villanueva, fue exaltado en La Noche de Los Mejores, otorgando el reconocimiento a la vida y obra de un jurista a nivel nacional.


Son tantos recuerdos del tío Rafael, que si bien es cierto no puedo anotarlos todos, no puedo dejar de contarles mi grata impresión al ver el nombre que le había colocado a su finca en Guaduas-Cundinamarca, Villanueva, sí, ese fue el nombre. Finca en la que celebró el nombramiento de su primo Jaime Tovar Herrera como Secretario General de la Presidencia en el mandato de Alfonso López Michelsen.

Murió en sana paz a los 93 años, como un Cardón guajiro, sin que lo marchitara el sol. Sin embargo, a pesar de las altas dignidades que ocupó el doctor Rafael Baquero Herrera a nivel nacional, considero pocos los homenajes que en vida recibió, pues personas como estas deben ser exaltados y puesto de ejemplo constantemente, para que sean no solo faros orientadores dentro de su generación, sino la luz que alumbra las nuevas generaciones. Creo que es hora de colocar en las mentes de esta juventud, nuevos ideales, una nueva forma en que se pueden destacar, utilizando la inteligencia, sería el mejor homenaje después de vida a Rafael Baquero Herrera.

Tal vez esta remembranza llene de nostalgia a quienes conocimos a Rafael. Tal vez amigos como Bladimiro y Laurentino Pérez, Jaime y Pedro Brito Herrera, Guillermo Curiel, Rafael Deluque Gómez, Benjamín Armenta López, Evaristo Acosta, en Monguí, sientan la ausencia de su partida, tal vez añoren esos tiempos viejos…

Por último, expreso mis condolencias a su familia que es mi familia. Ahora vuela alto tío. Dios te recibe en el seno de Abraham. Tu vida fue brillante, llena del colorido del amor y del amor filial, así como de su amistad incondicional y de su servicio a la patria