Yo quiero ser presidente de Colombia

 

hoyennoticia.com


Por Martín Nicolás Barros Choles


¡ No es una postulación !, son deseos y sueños, que merodean, transitan y circulan; en la mente de los seres humanos, conectados con medios que nos rodean y transmiten mensajes, creados en el mundo físico de Dios. A todas las personas nos asisten derechos múltiples, generales, comunes o exclusivos; libres de discriminación y privilegios.


 Desde el punto de vista, soñar despierto no siempre debe entenderse o mal interpretarse, como una locura, en relación y prevención, a las reacciones y comentarios que generaría, la publicación de este titular. Burlas, sarcasmos, memes y quizás, cuantas vainas más. A nadie se le puede coartar derechos políticos y sociales, de servir de manera voluntaria y aspirar, a dirigir atenciones, soluciones u oportunas acciones indiferentes, en beneficio colectivos. No se puede negar, esconder e ignorar; la falta de gobernabilidad que padecemos, generadora de inseguridad y violencia, que nos conlleva a fatalidad.


Todo ciudadano colombiano por naturaleza en ejercicio, mayor de 30 años, que no hayan sido condado, por delitos diferentes a políticos (rebelión, sedición, asonadas y conspiración) puede lanzarse, al vacío o al agua, como águilas o patos a una aventura electoral, en procura de ser elegido. Ha sido costumbre popular, que los candidatos a la presidencia de Colombia y otras naciones del mundo, los postulan, Partidos Político, aun cuando no es un requisito, acreditar la afiliación política. 


En Colombia, las operaciones de los partidos, es más comercial, que política, no están adoctrinado, ni alineado, a un pensamiento, carecen de registros militancias, están direccionados, por quienes ejercen con potestad vitalicia, a título de: amo, señor y dueño absoluto. Aquí lo que existe son empresas políticas, no partidos, contaminadas de corrupción, que deberían estar bajo el control, de la SuperSociedades, en vez del Consejo Nacional Electoral. 


Colombia una nación de variedades en entornos biodiversos y distribución geográfica territorial, con riqueza natural, víctima del deterioro forestal, minería y erosiones; que la empobrecen, con responsabilidad de quienes han gobernado, conllevando a desgracias, de vivir en miseria y en desigualdad permanentes, circunstancias que sirven y utilizan, para someter y humillar, rayando con principios democráticos excluyentes.


 Es bueno diferenciar gobierno popular, de dictaduras, aun cuando muchos están disfrazados en apariencia de popular, pero no resulta cierto, cuando amarran coaliciones, para repartirse entre unos pocos, “el ponqué” popular. Deduzcan lectores, las causas y origen de problemas, relativos, con: pobrezas, abandonos, retrasos en el desarrollo, crecimientos de violencias; consecuencias de malos gobiernos, que hemos soportado o resignado en degradaciones sociales.


El Costo de una campaña política a la presidencia es abismal. Los topes establecidos en la ley es una farsa, para lo que gastan durante los tres meses de campañas. El valor se acerca a cifras de billón en algunos candidatos favoritos. Esa ley utilizada para tumbar al presidente Gustavo Petro, vale huevo, todos candidatos con mucha opción, terminan violando los topes legales, aun cuando únicamente persiguen para investigar, al candidato ganador elegido, con apariencias contables incompletas, falsedades e inconsistencias, No se dispone de ningún mecanismo de control, auditorias para determinar, que cantidad de dinero por concepto de aportes ingresan a la campañas, de donde provienen, personas facultadas para recepcionar recursos, costos de eventos publicitarios discriminados, trasportes, divulgaciones propagandística, servicios laborales, arrendamientos general,  vehículo, inmuebles y otros.


Mi deseo de ser presidente de Colombia, no es otra, que la de dar, lección y enseñanza de gobierno, de participación popular, con prioridad uno, abrir fuentes, laborales, para afianzar y estabilizar hogares familiares. Seguidamente facilitar espacios, para motivar el deporte, el arte la cultura y recreaciones. Planificar, apoyar y promover, acciones y operaciones de infraestructuras y emprendimientos mercantiles. 


En tercer lugar, convocar una constituyente, para hacer todas las reformas que sean necesarias y pertinentes; con participación de  los sectores políticos, organizaciones sociales y gremiales; unificando criterios saludable vinculantes, con intención y propósito, de pacificar el medio viviente, garantizar seguridad, en el orden publico y en operaciones administrativa. Menguar la corrupción gradualmente, porque erradicarla de tajo, no es nada fácil, acabar con una costumbre tradicional, pero no será imposible con nuevas formaciones educativas y actuaciones ejemplares, para quienes, en el futuro, asuman responsabilidades populares, con implementación de nueva política social. Esa es mi visión, frente a tantas negligencias, en no hacer. “Ni bailan, ni dan barato”. O “no lavan, ni prestan la batea” De esta forma maduramos lejos de progresar.


Estamos acorralados por polarización y corrupción. Debemos liberarnos del yugo politiquero y contradictorios, de izquierda y derecha. De nada sirve seguir con uno u otro, bando o banda. Vamos de mal en peor. Es necesario probar nuevas alternativas con personas, desligadas de los carteles o bancadas. La izquierda que no había gobernado, tuvo la oportunidad, tampoco dió la talla e incumplió los cambios prometidos. Si ya conocemos quienes nos han gobernados, durante muchos años. ¿Seguiremos en las mismas, con los mismos, que nos han mal gobernados o nos abrimos a otras opciones, de mejores utilidades futuras, fortaleciendo la participación popular, subyugadas frente a poder representativos, que debe ser limitados, secundarios y dependiente de la democracia?


Gobernar, no es montar conciertos de bandas, para robar y enriquecerse, es servir solucionando problemas y necesidades, de todos indoles, controlar delincuencia y garantizar, seguridad y partición indiscriminada. No perseguir opositores y ´promover producciones apoyando y protegiendo la economía. No seguir perdiendo el tiempo en constantes confrontaciones polarizantes, entre izquierda y derecha, en ambas existen personas de calidad, que no han tenido la oportunidad de servir, por muchas condiciones, originales y transparentes, que los caracterizan, no se dejan utilizar de servidumbres, ni mucho menos, de idiota útil, para favorecer maniobras ilícitas que beneficien directamente al padrino, sin comprometerlo en conducta delictiva.


Se necesita un gobernante que no solo se incline y parcialice en divisiones, sino que pacifique los espíritus políticos, concilie diferencia en un transito de paz, fortaleciendo los cuerpos armados de estado, con tecnologías inteligentes y equipos de reacciones, para frenar arbitrariedad de organizaciones y operatividad, delincuenciales.


Recordando el historial de nuestros presidentes, que han gobernado por más de un siglo y la cantidad, de aspirantes, a candidatizarse, nada se me quita, con soñar y manifestar públicamente el deseo de ser presidente, aun cuando se logre por un milagro. Les aseguro que conmigo, les iría bien, mejor que con los antepasados gobernantes y con los que ahora pretenden gobernar. Nadie se quedaría sin trabajo, ni habría marginamiento, en participación de gobierno. Muchos precandidatos, fraccionado de inservibles partidos y tendencias ideológica, buscan ser presidente, para seguir igual de igual, sin esperanza de mejoría. Dime con quienes te coaligas y te acompañan, en la campaña presidencial y deduciremos el futuro del elegido presidente.


Los canales RCN o Caracol, deben hacer un reality, titulado: “Yo quiero ser presidente de Colombia” abierto para quienes aspiren, a la vez conocer muchos factores, personales, calidad intelectual, humana e informal, en un concurso televisivo.    

No hay comentarios.:

SU OPINIÓN ES MUY IMPORTANTE

Con tecnología de Blogger.